Colección de testimonios de ancianos sobre el uso de las plantas en las zonas rurales durante el siglo XX. Estos relatos son específicos de una cultura local y forman parte del Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI).
Colección de testimonios de ancianos sobre el uso de las plantas en las zonas rurales durante el siglo XX. Estos relatos son específicos de una cultura local y forman parte del Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI).
Patrimonio cultural
Conservatoire des Légumes Anciens du Béarn
Organización no gubernamental
2013
3bis Route du Bois, 64510 ASSAT, Francia
El objetivo de la asociación es promover la preservación de la biodiversidad y los ecosistemas mediante la formación y la conservación del patrimonio cultural inmaterial en un huerto dedicado a la protección y transmisión de saberes tradicionales.
Sus principales tareas son:
La asociación ha creado un huerto de conservación y educativo, abierto al público, que sirve de apoyo a :
El CLAB reúne dos invernaderos intrínsecamente unidos en el mismo emplazamiento:
Cuando se habla de protección y conservación, a menudo se hace hincapié en la preservación de la naturaleza: plantas, animales y biotopos. Sin embargo, a menudo se pasa por alto un elemento crucial: los conocimientos tradicionales que acompañan a esta biodiversidad. Estos conocimientos, fruto de la observación y la experiencia empírica de muchas generaciones, son igual de valiosos y vulnerables. Es imperativo reconocer y preservar este patrimonio inmaterial junto con la conservación de la naturaleza.
Dada la importancia de estos conocimientos para la humanidad, el CLAB se ha fijado el objetivo de recopilar todo lo que se pueda recoger de los antiguos, antes de que desaparezca cuando fallezcan los poseedores de estos conocimientos.
Se ha creado un grupo de reflexión para definir la actividad dentro de la estructura y su puesta en marcha. Para crear el grupo se lanzó una convocatoria de voluntarios.
Una carta moral definía la conducta de los voluntarios. Fue redactada por los miembros del grupo de reflexión. También contenía el procedimiento que debía seguir cada recopilador: se especificaron los medios utilizados (grabación, escritura) y el respeto de los derechos de imagen (vídeos, fotos). También se anotaba el uso que se iba a hacer de los datos recogidos y se explicaba a las personas entrevistadas (cuadernillo, informe, etc.).
El contacto con los propietarios no se hizo por casualidad, sino mediante una cuidadosa investigación local y el boca a boca. A veces fueron necesarias dos o tres visitas antes de empezar a recoger: conocerlos, generar confianza y explicarles el proceso de recogida en sí son fundamentales.
A continuación, las colecciones se pusieron a disposición del público en el Huerto del Conservatorio. Hojas informativas, terminales de sonido e incluso una película de 12′ muestran colecciones pasadas.
Los visitantes y voluntarios del huerto de conservación valoran y comprenden los esfuerzos realizados en este ámbito. Su sensibilidad hacia la conservación les permite apreciar las plantas desde una perspectiva diferente, similar a la de sus ancestros.
Recopilar conocimientos tradicionales y ancestrales relacionados con las plantas tiene una serie de ventajas y beneficios, desde el punto de vista cultural, social y ecológico. Estos son algunos aspectos clave:
Recopilar conocimientos tradicionales es una tarea delicada que requiere respeto, empatía y una metodología rigurosa. Se necesitan tanto habilidades interpersonales como saber hacer si se quiere recopilar con éxito.
En estos momentos estamos trabajando en la plataforma formativa GARDENISER ACADEMY, un espacio diseñado para ofrecer formación gratuita a hortelanos y hortelanas de toda Europa.
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